HOY APESTO A BOLÍVAR

Por Galel Cárdenas

Hoy apesto a Bolívar
Y su espada que enciende el Orinoco
En la vasta llama sin nombre.

Apesto a toda su cabalgadura
Que rompe los valles
Y las trenzas de la vega refulgente.

Apesto a cada una de sus botas
Pobrísimas y desnudas
A sus charreteras derruidas
Y rasgadas en cada uno de sus hombros.

Hoy, ni yo mismo resisto
El olor de su empeine encallecido
Sus hongos resplandecientes
Anudados por el aire libérrimo.

El agridulce contagio que invade
La cama desordenada y tibia
El hiriente impacto de la brisa
Que hace volcar la memoria
Hacia la última batalla.

Apesto y no sé por qué
A tanto pantalón deshecho
Con el mismo trote del jinete
Que nunca duerme
Y jamás descansa en la pilastra.

Y es que me viene a veces
Un mal olor de palabra
Que se encumbra en la montaña
En el retumbo del volcán equidistante
En el consejo que sale a romper
Las sombras desahuciadas
Me viene a veces
Un mal olor de gestos y ademanes
Que pueblan el tambor de la batalla
Que crecen sobre el grito
Que ordena la voz de los cañones
La fuerza redoblada en la trinchera
El puño que vence bayonetas
La espada que rumia su esperanza.

En fin, apesto a su mirada
Que enerva la luz y su horizonte
Apesto a su perfil que es viento
En la llanura
A su ceño de profeta en la cascada
A su mano de Dios encrucijado
A su abrazo que redime
Los siglos y su tiempo ensimismado.

Apesto Bolívar,
Por Dios y no me apeno.

*

Buena, Galel.
Un gran poema

Hay algunos que quieren oler a dioses, pero el olor de ellos nos queda grande a los mortales, de aquí que esos aspirantes a divinidades y vestidos de blanco nos acusaron de jucos, apestasos. Alguien, vestido de blanco, me gritó desde su impronta de egolpista: "Adios, juquencia", y yo, igual que UD, sentí orgullo. Entonces, sonreí. Más tarde, enlisté a los apestosos:

LOS APESTOSOS


Moises, el bíblico, apestaba a desierto amanecido
Jesús dejó apestada a sangre la cruz donde lo crucificaron
María, la virgen, apestaba a sufrimiento
Los dos muchachos del Popol Vuh apestaban a juego de pelota maya
Ben Hur apestaba a Circo Romano
Lempira y Caupolicán dejaron hediondos los arcabuces con que los mataron
Los iroqueses y piel roja deejaron tatuadas de sudor y sangre la tierra que les robaron
Morazán apestaba tánto a libertad que aún sentimos sus malos olores
Sandino y Farabundo apestaban a montaña verde
El Cinchonero apestaba a olancho indómitú
Lenin apestó con sus presencia El capital de Marx
El Che dejó su sangre aspetosa en los Andes
Fidel apesta a Sierra Madre
Evo,Chavez, Correa, Lula,Lugo, Kisner,Ortega, Fúnez, Mel, apestan a América libertaria,
Los hondureños apestan a resistencia
Galel apesta a Bolivar
Papá apestaba a guayaba madura
Yo aspiro a ser un apestoso como ellos.

Oscar Amaya Armijo

*

CONVERSANDO
CON EL POETA
OSCAR AMAYA ARMIJO

Por Roberto Zapata Varela

Amigo poeta, como usted, asocio el acto de trascender y la trascendencia en si, como los sucesos y los valores que se desprenden de dichos actos y de tal concepto, mismos que conducen a proporsionar al hombre y la mujer y a los seres vivos en general, las instancias de mayor valoración; aquellos que hacen posible que el hombre y la mujer profundicen y acentuen, con acciones sublimes, la elevación humana del hombre/@. Deberían ser trascenedentes los actos que dignifican; aquellos que perfeccionan la convivencia de los seres con instrumento elaborados sobre bases donde la equidad, el amor y la justicia participen como la argamasa vital que le de consistencia.

Recuerde que para Algirdas "el mundo es un lenguaje y no una colección de objetos" y que como tal aditamento de las relaciones del hombre y la mujer, asume las cargas de valores y contenidos propios de una sociedad, puesta, por supuesto, en una época dada. Servirá, para satisfacción de todos, para las explicaciones que se requieran. Las acciones humanas están demarcadas significativamente y expresan la percepción del mundo de quienes las practican; vale recordar, entonces, " que lo idiológico puede investir cualquier materia significante" y develar tanto a partir de las acciones como de los lenguajes, una cierta actitud frente a la vida, una postura de clase. Se puede amar a Honduras desde diferentes posturas y digo, posturas, por que lo que realmente le da consitencia a los discursos son las acciones; ya está dicho:"por sus actos los conoceréis".

Por eso Peirce da tres correlatos (categorías) para hacer posible la comprención de una realidad dada y no es sino en el tercero que coloca las leyes que rigen el funcionamiento de los fenómenos, pues para él esa es la categoría general que les da validez lógica y ordena lo real.

Si usted aplica estas categorías al comportamiento de nuestra sociedad actual, podrá decubrir que el comportamiento del pueblo hondureño sigue un orde y responde a la secuencia lógica de la convivencia en dos niveles: primero como respuesta ante el descontrol del orden establecido (aunque malo) provocado, pues era un encadenamiento en que ya estaba acostumbrado; pero además es una reacción ante el exabrupto que le quita la posibilidad de iniciar la conquista de un sueño. En tanto que, lo aberrate de la contraparte esta en los hechos de que se apropian de la totalidad de un poder, que ya poseen, enarbolando una razón que viola el discurso en que están sustentados sus ideales; y no obstante que ellos mismos saben que sus acciones son ilógicas, generan un discursos que denota sus apetencias pero aparenta una universalidad TRASCENDENTE, PUES NECESITAN CONVENCER A LOS QUE AÚN ESTÁN DORMIDOS y persuadirse de que lo que hicieron era lo correcto.

Pero volvamos al problema de si lo aberrante debería considerarse trascente. Hay tiranos que asumieron el poder por la simple ambición del dinero y desgobierna, asesinan, destruyen y resultan trascendentes ante la historia, porque quienes la escribieron compartían sus ideales, se aprovecharon de todos los beneficios que devienen del gobierno, son copartícipes de las acciones del desgobierno. Pero esa es una forma de trascendencia; la que se inscribe en el concepto simple de "operación de traspasar, saltar el límite". De esos abundan las noticias que cuentan el pasado, que no la historia, eh. Carías, Carrera, Hitler, Oswaldo López, Mussolini, Pinochet; pero usted que es estudioso, habrá recabado que la biografía de esos fulanos cada día se vuelve más pequeña. En cambio la figura de Morazán a medida que pasa el tiene y el pueblo se EMPODERA DE SUS IDEALES, sus estela es más luminosa.

Hay casos de malvados que ambiocionaban quedar en la historia e hicieron cuanto fue posible para lograrlo, se ocurre la noticia de las acciones de Eróstrato, que quemó el templo de Artemisa, más conocida como Diana, por su deseo de quedar en la historia. Cuentan que los efesios ordenaron borrarlo de cuanto documento hubiese para castigarlo; nadie debía pronunciar su nombre so pena de muerte; pero siempre hay un Estrabón que meta la pata.

Bajtin proponía para la búsqueda del significado, observar los objetos y las acciones para realmente recalar en las relaciones que se derivan de su enfrentamiento. Desde este ángulo, como desde la perspectiva de Peirce es más fácil descubrir que lo trascendente es siempre positivo. Trasciende la poesía, la Monalisa; trascienden las acciones de Juan Santamaría que se inmola para liberar al pueblo de Nicaragua. Creo que debemos seguir hablando, pues necesitamos encontrar la forma de superar la intensión de los efesios y escribir una historia patria que resuma las acciones trascendentes de este pueblo nuestro que hoy día se realiza, se agranda en las calles.

Un abrazo, poeta amigo.