segunda-feira, 16 de novembro de 2009

Zelaya desconoce
elecciones del 29



El presidente derrocado Manuel Zelaya Rosales renunció la noche del sábado a cualquier posibilidad de ser restituido en el cargo para encubrir el golpe de Estado y declaró que desconoce el proceso electoral del 29 de noviembre porque los “golpistas” ya decidieron quién será el presidente y los próximos diputados y alcaldes.

La decisión fue establecida en una carta que Zelaya le envió al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, en la que cuestiona a ese país por su cambio de posición frente a la situación de Honduras, por anunciar que reconocerán las elecciones “con o sin restitución”.

“La nueva posición de los funcionarios del Gobierno de los Estados Unidos esquiva el objetivo inicial del Diálogo de San José, relegando un acuerdo con el gobierno legítimamente reconocido hacia un segundo plano y tratando de trasladar este acuerdo hacia un nuevo proceso electoral sin importar las condiciones en que se desarrolle”, señala la carta de Zelaya Rosales a Obama.

Indica en su renuncia que los Estados Unidos reconoce un régimen “ilegal porque oculta el golpe de Estado militar, y el estado de facto en que vive Honduras no brinda garantías de igualdad y libertad en la participación ciudadana a todos los hondureños”.

Es una maniobra electoral antidemocrática —agrega la misiva— “repudiada por grandes sectores del pueblo para encubrir los autores materiales e intelectuales del Golpe de Estado”.

Por tales motivos “yo no acepto ningún acuerdo de retorno a la presidencia para encubrir el golpe de Estado, que sabemos que tiene un impacto directo por la represión militar sobre los derechos humanos de los habitantes de nuestro país”, dice.

La carta de Mel a Obama recuerda que “el 8 de julio se reunieron con la secretaria de Estado, Hillary Clinton, y se dejó claro ante mí y ante el mundo la posición de la administración Obama de condenar el golpe de Estado, desconocer sus autoridades y exigir el retorno del estado de derecho con la restitución al cargo de presidente electo por el pueblo”.

Incluso esa fue la posición oficial “de su Gobierno y sus representantes que patrocinaron y firmaron las resoluciones de la ONU y la OEA que en el tercer punto exige mi restitución inmediata y segura”.

Por ello en la primera reunión con la secretaria Hillary Clinton “me propusieron la mediación del presidente de Costa Rica, Oscar Arias, a pesar de que considero que es contraproducente dialogar con personas que tienen un arma en sus manos, acepté considerando el auspicio de EE UU y de la comunidad internacional”, dice la carta.

Sin embargo, “Micheletti nunca tuvo voluntad de colaborar y, por el contrario, se estaba burlando de la comunidad internacional y sólo buscaba dilatar el tiempo para nunca entregar el poder a quien corresponde y Estados Unidos toleró esas dilatorias”, añade.

“El propio día en que se instalaba en Tegucigalpa la Comisión de Verificación del Acuerdo sorprendieron las declaraciones de funcionarios del Departamento de Estado donde modifican su posición diciendo que las elecciones serían reconocidas por Estados Unidos con o sin restitución”, señala el escrito.

Como es lógico, el régimen de facto celebró este cambio y “utilizaron estas declaraciones para sus objetivos e inmediatamente terminaron por incumplir y violar el Acuerdo”, indica.


Por tales motivos, Zelaya reitera que el Acuerdo “Tegucigalpa/San José queda sin valor ni efecto por incumplimiento unilateral del gobierno de facto ya que éste fue concebido para implementarse en forma integral y simultánea, pues no se contemplaron como doce acuerdos separados, fue un solo acuerdo con doce puntos el cual tenía un solo propósito, restaurar el orden democrático y la paz social, y con esto se revirtiera el golpe de Estado, lo que implica el seguro retorno del Presidente de República elegido legítimamente por voto popular”.

Esto debido a que la nueva posición de los funcionarios del Gobierno de los Estados Unidos esquiva el objetivo inicial del Diálogo de San José, relegando un acuerdo con el gobierno legítimamente reconocido hacia un segundo plano y tratando de trasladar el mismo hacia un nuevo proceso electoral sin importar las condiciones en que se desarrolle, establece.

En estas condiciones, este proceso, y por lo tanto sus resultados, serán sujetos de impugnación y no reconocimiento, lo cual pone en grave riesgo la estabilidad futura de Honduras, señala la carta.

Zelaya trasladó a la comunidad internacional la responsabilidad de investigar delitos como la detención ilegal de 3,500 personas, más de 600 personas heridas y golpeadas en los hospitales, más de un centenar de asesinatos y una incontable cantidad de personas sometidas a torturas cometidas contra ciudadanos que se atreven a oponerse y manifestar sus ideas de libertad y justicia.

Fonte: Diario Tiempo (Honduras).

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Miembros de resistencia
reafirman que no votarán


La Resistencia en Contra del Golpe de Estado que derrocó al presidente Manuel Zelaya informó que sigue firme en su posición de que si no hay restitución no hay elecciones pacíficas.

“Se acerca la fecha donde van ser las elecciones, por eso el pueblo y la resistencia no acudirán a las urnas”, dijo en un comunicado del Frente de Resistencia Nacional.

Ningún miembro de la resistencia puede participar en esa farsa que sólo busca legitimar un gobierno de fuerza que asesina a nuestro pueblo, dice el comunicado.

Un miembro de la resistencia que no se identificó dijo que el gobierno planea capturar el 25 de noviembre a 13 mil miembros de la resistencia para detener el boicot, pero no lo detendrán porque tienen más de 400 mil personas dispuestas a participar.

En los comicios están aptos para votar 4.5 millones de hondureños aglutinados en cinco partidos políticos de diferente ideología, pero según la resistencia esta vez nadie irá a las urnas.

Fonte: Diario Tiempo (Honduras).

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Rasel Tomé:
Elecciones deben
impugnarse por
falta de libertad


El pueblo debe impugnar el proceso eleccionario porque no existen condiciones para efectuarlo ya que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) está conformado inconstitucionalmente; por la represión que está sufriendo la resistencia popular; y la falta de credibilidad internacional que no lo apoyará.

Así se pronunció uno de los líderes de la Resistencia Popular y ex presidente de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (CONATEL), Rasel Tomé, desde la embajada de Brasil, donde acompaña al derrocado presidente Manuel Zelaya Rosales desde el 21 de septiembre anterior.

“Para participar en un proceso electoral tienen que haber condiciones para poder realizarlo, tiene que haber libertad de participación, condiciones equitativas e igualitarias para todos los que están en ese proceso político”.

“Iniciemos diciendo que el TSE, los miembros están de forma inconstitucional, los tres son personas que estaban en cargos de elección popular”, ya que David Matamoros y Enrique Ortez Sequeira eran diputado y regidor municipal, apuntó el abogado.

Expresó que un segundo aspecto es que en este proceso electoral no se han dado las condiciones que requiere un pueblo para participar en una gesta electoral, porque no ha existido campaña política.

“No se han dado las posibilidades de la campaña política, para que haya campaña política tienen que haber condiciones para ir a hacer las propuestas, lo que ha habido aquí es represión, lo que ha habido es restricción de cada uno de los derechos políticos y en esta situación tenemos que hacer un énfasis muy específico, no podemos hablar de equidad”, sostuvo.

El tercer elemento que considera para que sea nulo el proceso electoral del domingo 29 de noviembre es que no hay credibilidad porque ninguna organización internacional como las Naciones Unidas; la Organización de los Estados Americanos (OEA); la Comunidad Europea; el organismo centroamericano de integración, SICA, vendrán a observar este proceso electoral.


Lo dijo

“Eso nos indica que no hay legitimidad y que no hay credibilidad, por estas razones este proceso es nulo”: Rasel Tomé.

Fonte: Diario Tiempo (Honduras).

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