LA RESISTENCIA
ES EL PODER REAL
EN HONDURAS

Por Oscar Amaya Armijo

No cabe duda que la Resistencia es un poder real en Honduras. Nada puede hacerse sin contar con esta enorme fuerza social. Actuar contrario a esta realidad es padecer de una miopia incurable.

La resistencia está por encima de todas las fuerzas políticas hondureñas hasta ahora concebidas. Prueba de ello es que ni siquiera el Estado de Sitio detiene el crecente accionar de este movimiento político social.

Ni siquiera las Fuerzas Armadas le iguala en número y fuerza, a tal grado que si el accionar de la Resistencia no fuera pacìfico qué tiempos hubieran desarmado a aquel aparato represivo de los golpistas.

No se exagera, pero los futuros gobiernos seràn de la Resistencia para realizar las necesarias trasformaciones económicas,políticas y sociales, por la vìa de la Asamblea Nacional Constituyente.

Nadie desconoce que en la Resistencia militan la mayoría de las cuadros profesionales, tècnicos- administrativos e intelectuales de gran valía para realizar una gestión y administración estatal que supera con creces al lumpen golpista que hoy desgobierna el país.

En la Resistencia también militan empresarios honrados, pequeños propietarios, militares patriotas, obreros calificados, campesinos honestos,los grupos étnicos, las mujeres en resistencia, los gay, todos ellos dispuestos a participar en la recosntrucción nacional.

La Resistencia, hecha gobierno, hará de Honduras un país desarrollado y progresista al servicio de todos los hondureños; sobre todo, para aquellos que hoy viven en la indigencia.

No cabe la menor duda de lo arriba apuntado, por esto es que tiembla la oligarquìa, y por que sabe que la Resistencia es fuerza e intelecto a la vez. No duermen por que también saben que este movimiento se convirtiò en símbolo y vanguardia de todos aquellos que en el planeta luchan contra la injustica y la opresiòn.

Por supuesto, no se desconoce que la Resitencia tiene, en los actuales momentos, muchos problemas organizativos que superar, pero aún así su marcha es incuestionable y contundente. Por ello no duermen los golpistas.

Honduras no significaría nada sin la Resistencia. Nadie puede desconocerla, por mucho que lo intenten las fuerzas ultraderchistas que apoyan a este desgobierno.

En tal sentido, la Resistencia debe mantener a todo precio su unidad inquebrantable, pese a la diversidad de matices, porque en ello radica su triunfo y el cambio cualitativo que requiren los hondureños en todos los ámbitos.

La resitencia es hoy por hoy el único sendero que se tiene para la salvaciòn nacional.