Acuerdo de Micheletti
y Zelaya entra en
vigor en Honduras
y Zelaya entra en
vigor en Honduras
Por Ana Fernández y Noé Leiva
El acuerdo entre las delegaciones del gobierno de facto de Roberto Micheletti y del mandatario depuesto Manuel Zelaya, que prevé la restitución de éste previo aval del Congreso, entró en vigor este viernes, poniendo punto final a una crisis política de cuatro meses.
"Ya está el acuerdo totalmente firmado", dijo Rodil Rivera, representante de la delegación de Zelaya, al entregar en el Congreso este documento, cuyos flecos pendientes fueron negociados en la mañana del viernes.
"Para efectos internos, el Acuerdo tiene plena vigencia a partir de su firma. Para efectos protocolarios y ceremoniales, se llevará a cabo un acto público de suscripción el día 2 de noviembre", reza el documento al que tuvo acceso la AFP.
El texto de cinco páginas, denominado Acuerdo Tegucigalpa-SanJosé Diálogo Guayamuras (nombre de Honduras antes de la llegada de los españoles), incluye un calendario de aplicación, que prevé que "a más tardar el 5 de noviembre" se haya constituido el gobierno de unidad nacional.
Después de semanas de arduas negociaciones, la delegación enviada el miércoles por la secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, encabezada por su responsable para América Latina, Thomas Shannon, consiguió acercar unas posiciones que parecían irreconciliables.
El presidente de facto aceptó la noche del jueves el punto principal del acuerdo, la restitución de Zelaya, previo consentimiento del Congreso, desbloqueando la crisis.
"El Congreso Nacional tomará la decisión de restituir o no al depuesto presidente Manuel Zelaya, conforme lo que establece la Constitución y las leyes hondureñas", dijo el presidente del Congreso, Alfredo Saavedra, a la prensa.
Una vez entregado a la secretaría, Saavedra deberá convocar a "la junta directiva y a los jefes de bancada para conocer el contenido todos" y luego continuar con el procedimiento.
La resolución final se emitirá mediante un decreto, puesto que es "la única forma que tiene carácter vinculante", agregó Saavedra.
"Es un primer paso para concretar mi restitución que tendrá que sufrir varios momentos. Yo soy un optimista moderado", declaró a la AFP el presidente constitucional desde la embajada de Brasil, donde se refugia desde que llegó al país clandestinamente el 21 de septiembre.
Su restitución "tiene que ser mucho antes de las elecciones para poder validarlas", anticipó, en referencia a los comicios presidenciales del 29 de noviembre.
El acuerdo está lleno de limitantes para Zelaya, que ha tenido que renunciar a su pretensión de reformar la Constitución y gobernará con un gobierno de unidad nacional establecido por las dos partes en el conflicto.
El medio millar de partidarios de Zelaya que acudieron al Congreso en el centro de Tegucigalpa para celebrar este acuerdo y presionar a los 128 diputados de la Cámara -actualmente en receso- advirtieron al presidente que salga de las urnas el 29 de noviembre que seguirán su lucha "por la Constituyente, como movimiento social a nivel nacional".
Sendas comisiones verificarán el cumplimiento del acuerdo e investigarán los sucesos de antes, durante y después del golpe de Estado que lo expulsó a Costa Rica, entre otros puntos.
Micheletti solicitó a la comunidad internacional que derogue las sanciones contra Honduras y envíe observadores internacionales a las elecciones.
Sin embargo, varios países de la OEA llamaron a la cautela y a no tomar decisiones apresuradas.
No obstante, el acuerdo fue recibido con gran alivio por la comunidad internacional, que ha luchado con denuedo para restablecer el orden constitucional en Honduras.
Shannon, que abandonó Honduras este viernes, calificó de "héroes de la democracia" a los negociadores y alabó el "liderazgo político de Zelaya y Micheletti" que permitió alcanzar una solución, mientras desde Pakistán, la secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, hablaba de del "histórico acuerdo".
Tegucigalpa, 30 oct (EFE).- El presidente de facto de Honduras, Roberto Micheletti, señaló hoy que el estatus del depuesto mandatario, Manuel Zelaya, en la embajada de Brasil en Tegucigalpa no cambia con el acuerdo alcanzado para que el Parlamento resuelva sobre su restitución en el poder.
"La situación, el estatus del señor Zelaya, sigue siendo como un visitante en la casa de Brasil, y eso lógicamente (se mantendrá) hasta que la decisión del Congreso sea tomada", dijo el gobernante de facto a la radio HRN.
"Nosotros, creo que tenemos que cumplir con nuestras obligaciones" de mantener la seguridad afuera de la sede diplomática, apuntó, en referencia al fuerte contingente militar y policial que acordona la zona, desde donde Zelaya ha denunciado el hostigamiento de distintas maneras de las fuerzas de seguridad.
Zelaya, su esposa, Xiomara Castro, y unas 40 personas más, entre colaboradores y periodistas, permanecen refugiados en la legación desde el 21 de septiembre pasado, luego de que el mandatario depuesto el 28 de junio volviera clandestinamente a Honduras.
El acuerdo firmado por las delegaciones de Micheletti y Zelaya establece que el Congreso deberá consultar con la Corte Suprema de Justicia (CSJ) y otros órganos del Estado antes de resolver si el depuesto gobernante vuelve al poder, del que fue derrocado el 28 de junio.
Micheletti dijo que está "muy contento por el resultado: el final lo van a protagonizar el Congreso Nacional, la CSJ y los otros organismos del Estado", y subrayó que "Honduras ha ganado".
Sobre las perspectivas en el Parlamento, que él presidió hasta el 28 de junio, cuando ese órgano le designó para sustituir al derrocado Zelaya, Micheletti dijo esperar que los diputados actúen con independencia y que no se dejen presionar.
Micheletti pidió a sus ex compañeros del Congreso que "la decisión que tomen sea la legal, que no se permitan ninguna influencia de ninguna naturaleza, de nadie, para que ellos tomen la decisión enmarcada dentro de la Constitución".
"Los diputados son independientes (...) Tengo la total seguridad de que van a tomar una sabia decisión para el bien y la tranquilidad del país", dijo.
Micheletti, quien mantiene que la Corte debe resolver sobre la restitución porque Zelaya tiene procesos pendientes, recordó que "el planteamiento de que fuera el Congreso el que decidiera la situación del señor Zelaya lo propusieron ellos" la semana pasada.
"Nosotros solo aceptamos que sea a través del Congreso", que tomará en cuenta "una opinión vertida por la CSJ y otros organismos del Estado", explicó.
"En este país no debe hablarse nunca más de borrón y cuenta nueva. Los delitos que cometemos tenemos que pagarlos y son, lógicamente, los tribunales de justicia que tienen que tomar esas decisiones", dijo.
"Ya está el acuerdo totalmente firmado", dijo Rodil Rivera, representante de la delegación de Zelaya, al entregar en el Congreso este documento, cuyos flecos pendientes fueron negociados en la mañana del viernes.
"Para efectos internos, el Acuerdo tiene plena vigencia a partir de su firma. Para efectos protocolarios y ceremoniales, se llevará a cabo un acto público de suscripción el día 2 de noviembre", reza el documento al que tuvo acceso la AFP.
El texto de cinco páginas, denominado Acuerdo Tegucigalpa-SanJosé Diálogo Guayamuras (nombre de Honduras antes de la llegada de los españoles), incluye un calendario de aplicación, que prevé que "a más tardar el 5 de noviembre" se haya constituido el gobierno de unidad nacional.
Después de semanas de arduas negociaciones, la delegación enviada el miércoles por la secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, encabezada por su responsable para América Latina, Thomas Shannon, consiguió acercar unas posiciones que parecían irreconciliables.
El presidente de facto aceptó la noche del jueves el punto principal del acuerdo, la restitución de Zelaya, previo consentimiento del Congreso, desbloqueando la crisis.
"El Congreso Nacional tomará la decisión de restituir o no al depuesto presidente Manuel Zelaya, conforme lo que establece la Constitución y las leyes hondureñas", dijo el presidente del Congreso, Alfredo Saavedra, a la prensa.
Una vez entregado a la secretaría, Saavedra deberá convocar a "la junta directiva y a los jefes de bancada para conocer el contenido todos" y luego continuar con el procedimiento.
La resolución final se emitirá mediante un decreto, puesto que es "la única forma que tiene carácter vinculante", agregó Saavedra.
"Es un primer paso para concretar mi restitución que tendrá que sufrir varios momentos. Yo soy un optimista moderado", declaró a la AFP el presidente constitucional desde la embajada de Brasil, donde se refugia desde que llegó al país clandestinamente el 21 de septiembre.
Su restitución "tiene que ser mucho antes de las elecciones para poder validarlas", anticipó, en referencia a los comicios presidenciales del 29 de noviembre.
El acuerdo está lleno de limitantes para Zelaya, que ha tenido que renunciar a su pretensión de reformar la Constitución y gobernará con un gobierno de unidad nacional establecido por las dos partes en el conflicto.
El medio millar de partidarios de Zelaya que acudieron al Congreso en el centro de Tegucigalpa para celebrar este acuerdo y presionar a los 128 diputados de la Cámara -actualmente en receso- advirtieron al presidente que salga de las urnas el 29 de noviembre que seguirán su lucha "por la Constituyente, como movimiento social a nivel nacional".
Sendas comisiones verificarán el cumplimiento del acuerdo e investigarán los sucesos de antes, durante y después del golpe de Estado que lo expulsó a Costa Rica, entre otros puntos.
Micheletti solicitó a la comunidad internacional que derogue las sanciones contra Honduras y envíe observadores internacionales a las elecciones.
Sin embargo, varios países de la OEA llamaron a la cautela y a no tomar decisiones apresuradas.
No obstante, el acuerdo fue recibido con gran alivio por la comunidad internacional, que ha luchado con denuedo para restablecer el orden constitucional en Honduras.
Shannon, que abandonó Honduras este viernes, calificó de "héroes de la democracia" a los negociadores y alabó el "liderazgo político de Zelaya y Micheletti" que permitió alcanzar una solución, mientras desde Pakistán, la secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, hablaba de del "histórico acuerdo".
Fonte: EFE.
*
Micheletti dice que
la situación de Zelaya
en la embajada
de Brasil no cambia
la situación de Zelaya
en la embajada
de Brasil no cambia
Tegucigalpa, 30 oct (EFE).- El presidente de facto de Honduras, Roberto Micheletti, señaló hoy que el estatus del depuesto mandatario, Manuel Zelaya, en la embajada de Brasil en Tegucigalpa no cambia con el acuerdo alcanzado para que el Parlamento resuelva sobre su restitución en el poder.
"La situación, el estatus del señor Zelaya, sigue siendo como un visitante en la casa de Brasil, y eso lógicamente (se mantendrá) hasta que la decisión del Congreso sea tomada", dijo el gobernante de facto a la radio HRN.
"Nosotros, creo que tenemos que cumplir con nuestras obligaciones" de mantener la seguridad afuera de la sede diplomática, apuntó, en referencia al fuerte contingente militar y policial que acordona la zona, desde donde Zelaya ha denunciado el hostigamiento de distintas maneras de las fuerzas de seguridad.
Zelaya, su esposa, Xiomara Castro, y unas 40 personas más, entre colaboradores y periodistas, permanecen refugiados en la legación desde el 21 de septiembre pasado, luego de que el mandatario depuesto el 28 de junio volviera clandestinamente a Honduras.
El acuerdo firmado por las delegaciones de Micheletti y Zelaya establece que el Congreso deberá consultar con la Corte Suprema de Justicia (CSJ) y otros órganos del Estado antes de resolver si el depuesto gobernante vuelve al poder, del que fue derrocado el 28 de junio.
Micheletti dijo que está "muy contento por el resultado: el final lo van a protagonizar el Congreso Nacional, la CSJ y los otros organismos del Estado", y subrayó que "Honduras ha ganado".
Sobre las perspectivas en el Parlamento, que él presidió hasta el 28 de junio, cuando ese órgano le designó para sustituir al derrocado Zelaya, Micheletti dijo esperar que los diputados actúen con independencia y que no se dejen presionar.
Micheletti pidió a sus ex compañeros del Congreso que "la decisión que tomen sea la legal, que no se permitan ninguna influencia de ninguna naturaleza, de nadie, para que ellos tomen la decisión enmarcada dentro de la Constitución".
"Los diputados son independientes (...) Tengo la total seguridad de que van a tomar una sabia decisión para el bien y la tranquilidad del país", dijo.
Micheletti, quien mantiene que la Corte debe resolver sobre la restitución porque Zelaya tiene procesos pendientes, recordó que "el planteamiento de que fuera el Congreso el que decidiera la situación del señor Zelaya lo propusieron ellos" la semana pasada.
"Nosotros solo aceptamos que sea a través del Congreso", que tomará en cuenta "una opinión vertida por la CSJ y otros organismos del Estado", explicó.
"En este país no debe hablarse nunca más de borrón y cuenta nueva. Los delitos que cometemos tenemos que pagarlos y son, lógicamente, los tribunales de justicia que tienen que tomar esas decisiones", dijo.
Fonte: EFE.
Nenhum comentário:
Postar um comentário