segunda-feira, 5 de abril de 2010

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Ilustração: Uelinton Silva.


Las advertencias
de los fascistas:

derechos humanos
y régimen golpista


Por Ricardo Salgado

No soy del tipo de persona se considera a sí misma como alguien especial. Dentro del marco de la lucha del pueblo hondureño, apenas soy un obrero más en la construcción de una patria mejor, más justa para todos. Nunca antes había pensado que mi familia o yo podíamos ser objeto de las agresiones aberrantes provenientes de los asesinos que funcionan con la complicidad y patrocinio del régimen de Porfirio Lobo Sosa.

Tampoco he considerado durante los meses precedentes que yo pueda constituir una amenaza para el Estado de Honduras o para la oligarquía que de facto lo rige. Es cierto que en Honduras a partir del 28 junio último pensar es un delito, y la mejor forma de preservar la seguridad personal y familiar es manteniéndose al margen de la critica de las atrocidades que ejecutan las autoridades espurias en todas sus acciones. Para los que no entienden la dimensión de las cosas, debe quedar claro que vivimos un régimen de características claramente fascistas, que continúa asesinando como forma de persuasión y de sojuzgamiento de cualquier intención de cambio.

El Viernes Santo último, salí de mi casa con mi esposa, con destino a un supermercado de Tegucigalpa. A la altura del STIBYS sentí que se me dificultaba la maniobra de mi vehículo automotor, lo que me movió a reducir la velocidad, y después de 50 m la rueda izquierda trasera salió de su posición y el vehículo quedó sin control. Después de unos minutos de pánico, fui a ver qué había provocado este evento y constaté que faltaban las tuercas que sostenían habitualmente las ruedas en su lugar.

En una ciudad sin tráfico por la fecha, pude contar con la ayuda de un señor que se detuvo amablemente para ayudarme a poner la rueda de regreso, utilizando tuercas de las ruedas restantes. El vehículo no presentaba ninguna otra seña de mal funcionamiento, y el único indicio racional me lleva a pensar que las tuercas fueron aflojadas deliberadamente con el propósito de atentar contra mi persona y mi familia.

Éstos actos criminales y bestiales, lejos de amedrentarnos y separarnos de nuestras convicciones, reafirman nuestros principios y nuestra disposición firme e inquebrantable de seguir adelante en cualquier actividad que signifique un paso en favor de la refundación del país. No entienden los fascistas, y esto no es raro, que hagan lo que hagan no pueden detener el desarrollo histórico ni la voluntad de los pueblos.

Es preocupante que los derechos humanos en Honduras se encuentran bajo control de personas que no muestran el más mínimo interés por el respeto de los mismos, y más terrible aún resulta la reacción timorata de la comunidad internacional frente a un régimen que ve con escarnio y desdén tanto la vida de los compatriotas como la importancia de lo que opinen otros países, sus gobiernos y sus pueblos.

El asesinato político, la intimidación cobarde y la calumnia artera son prácticas comunes de quienes hoy gobiernan por la fuerza nuestro país. No nos referimos únicamente a la caricatura de gobierno que nos impusieron las bayonetas en noviembre pasado, sino toda la superestructura de dominación que manipula los hilos conductores de los órganos represivos del estado y sus pares paramilitares. Es normal leer en los diarios el Heraldo y la Prensa, y la Tribuna, o ver en las noticias de Televicentro, notas sesgadas sobre la situación agraria en el bajo Aguan, donde aseguran existen grupos cubanos, venezolanos y nicaragüenses que han ingresado armas ilegalmente al país. Éstos medios, sumados a las miles de estaciones radiales ligadas a la represión hacen una justificación diaria de los crímenes que están por cometerse contra los hermanos campesinos.

No resulta dificil comprender que el régimen de Lobo Sosa siga con la política salvaje, brutal y feroz del desgobierno de Micheletti, pues en esencia lo que ahora tenemos no es más que una continuación de aquello. Los crímenes de lesa humanidad, la violación constante a los derechos humanos han constituido una piedra angular para que la oligarquía trate de consolidar un régimen ilegal, ilegítimo, pero por sobre todas las cosas, asesino.

Lo que es difícil entender es como, sabiendo de la vileza que caracteriza desde hace siglos a la política internacional de los Estados Unidos, muchos gobiernos se sigan portando con tibieza y busquen espacios de negociación con un gobierno hipócrita y cobarde, cuyo único interés radica en la reinserción de Honduras en el concierto de las naciones con el fin de recibir el apoyo económico internacional (que representa mas del 30 por ciento del presupuesto nacional de la República) para continuar con la piñata interminable de la corrupción, la colusión, el compadrazgo político y la impunidad.

No es posible, ni aceptable, que los países de la comunidad internacional busquen apoyar a un Estado, como el de Honduras, sin condicionar a éste para que respeten los derechos elementales de todos sus ciudadanos, así como todas las convenciones internacionales relacionadas con esta materia. Hoy día, todo precepto jurídico local o internacional, es simplemente ignorado por todos los estamentos de aplicación y administración de la justicia hondureña, mientras la arbitrariedad más completa constituye la ley aplicada por un manojo de payasos que se dicen jurisconsultos y defensores de la institucionalidad.

A los hondureños no nos resta más que vivir en indefensión indefinidamente; hasta que las condiciones históricas determinen la acción popular extrema, y el pueblo se vea obligado a abandonar, en razón de su propia supervivencia, su posición pacifista frente a un agresor que cada día se animaliza más, y se vuelve cada vez menos sensible a las denuncias y otras acciones que se llevan a cabo en defensa de los derechos humanos.

Los líderes de todos los países del mundo, deben entender (si es que no lo entienden ya y son cómplices de lo que está pasando) que en Honduras estamos expuestos absolutamente a la arbitrariedad de las mismas personas que decidieron que es muy democrático balacear la casa del Presidente, ponerle una piyama y mandarlo a otro país, aduciendo que estas acciones eran un trámite esencialmente constitucional.

Constituye un terrible precedente para todas las naciones civilizadas del mundo, aceptar con complacencia las acciones de un Estado Terrorista que no tiene la menor consideración para con sus ciudadanos, a los cuales está dispuesto a matar por exceso de balas o por escasez de alimentos y medicinas.

Estamos cansados de culpar por los crímenes de lesa humanidad y violaciones a los derechos humanos a un régimen cavernario que se burla sin límite de la abulia y negligencia inconmensurable de naciones que se autodenominan civilizadas. Hoy estamos obligados a culpar a estas naciones por lo que nos pasa a todos aquí.

Y son culpables, por acción u omisión, desde que irrespetando el derecho a nuestra autodeterminación, impulsaron el engaño de Oscar Arias y el circo montado por los golpistas dizque para cumplir con los acuerdos de ese ignominioso pacto. ¿Cómo es posible que hoy justifiquen todas las atrocidades y pidan el reconocimiento para la administración fascista de Porfirio Lobo Sosa? ¿Qué harán Oscar Arias y Hillary Clinton para preservar las vidas de nuestra gente?.

No eximimos a los asesinos, simplemente señalamos a los responsables de lo que nos pueda pasar a todos y a todas en esta caricatura del país que han construido los gringos con el afán de utilizarla nuevamente como una base de agresión hacia todo el resto del continente.

Pedimos a los pueblos hermanos se solidaricen de palabra y hecho con el pueblo hondureño, y generen opciones verdaderas de protección para este pueblo indefenso, cuyo único delito es buscar un mundo mejor.

En esta hora de desconcierto y vulnerabilidad, no podemos pedir menos.

Hasta la victoria siempre

4abril2010

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ATENTAN CONTRA VIDA
DE R. SALGADO Y ESPOSA

Compañeras y compañeros de Nuestra América:

Uno de los intelectuales más lúcidos y esclarecidos del Frente Nacional de Resistencia Popular e imbatible luchador social, el compañero Ricardo Salgado, ha sufrido el pasado "Viernes Santo", 2 de abril, un atentado contra su vida y la de su esposa; los detalles de tan cobarde acción los detalla él mismo en líneas que anteceden.

Los represores son sanguinarios y astutos, saben que no pueden matar directamente, a balazos -como lo suelen hacer- al respetable maestro Ricardo Salgado y su familia sin que el mundo entero hubiese levantado un muro de repudio contra el espurio presidente de teatro títere, Porfirio Lobo. Por ello intentaron amañar un "accidente"; felizmente fracasaron.

Pero ese "aviso" ha de ser tomado muy en cuenta por nuestros dirigentes del FNRP para las medidas de emergencia que estime pertinentes a fin de preservar la seguridad del c. Salgado y su familia.

Todos en Honduras y en Nuestra América nos mantenemos alerta; muy atentos. No vamos a permitir que los energúmenos en el poder continúen desarrollando su plan de extermino selectivo. No vamos a quedarnos mano sobre mano, sin hacer nada. Acudiremos a las instancias internacionales pertinentes para elevar nuestra queja por el silencio cómplice de los representantes de los gobiernos, "entretenidos" en bagatelas, mientras prosiguen los crímenes contra los Resistentes y la infame persecución de nuestros hermanos campesinos, la invasión de sus tierras y la imperdonable secuela de violaciones, secuestros, torturas, asesinatos e incendios de los humildísimos hogares de quienes libran una justa lucha por defender SU heredad ancestral.

¡Juntos, hasta la Victoria!, ¡Viva Honduras!, ¡Abajo la represión!, ¡No a las amenazas!, ¡La Tierra es de quien la trabaja!

Fraternalmente, Igor Calvo.

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Amigo Ricardo:

Es una pena que ocurra esto en nuestro pais con personas como usted. Sabemos de la cobardìa del règimen y de sus mètodos para atemorizar a la Resistencia. A nosotros -que los conocemos-, se nos suma la tarea de denunciarlos, combartirlos y derrotarlos, a la vez que debemos protegernos de sus bajezas y todos sus mètodos.

Le tienen a miedo a la ideas porque ellos no tienen ninguna, Llorens piensa por ellos... ¿¡imagìnese!? Sì Llorens que es un triste imbècil.

Reciba de la OPLN toda la solidaridad, estamos a su ordenes en lo que podamos contribuirle,

¡Necedad!

Gilberto Rìos Munguìa
Secretario de Formaciòn Polìtica e Ideològica
OPLN

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Estimado compañero Ricardo Salgado
Expresamos nuestra soliaridad con usted, esposa y familia por el atrenta a su vida familiar.Estamos muy conscientes de todo su valor intelectual y la firmeza de sus conviciones. Cualquier situacion de solidaridad puede comunicarse al CPTRT 2527819. Estamos en la mejor disposición de ser solidarios, Juan Almendares.

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Un escritor hondureño declaró al Clarin de CHile que en Honduras no se perseguían a los escritores, por que aquí a nadie se persígue por escribir. Estas palabras podrían ser ciertas, pero en Honduras se persígue y se amenaza a los escritores que ponen su pluma y pensamiento al servicio de la Resitencia. Aquí podríamos exponer una lista de escritores que estan amenazados solamente por que escriben contrario a lo que piensan los gobernantes golpistas.

Las amenzas van desde las más "tibias" como aquella "baje su perfil, puede tener problemas" "no siga escribiendo yo sé por que se lo digo" o " sus hijos están muy pequeños, no vale la pena que se queden solos" y así hasta llegar a atentar contra la vida, como le ocurrió a Ricardo Salgado, joven escritor que nace escribiendo precisamente al fragor del golpe de Estado y con una lucidez que ya querrían tener los intelectuales golpistas.

En el peor de los casos es que la honestidad intelectual se pague con la muerte como le ocurrió al escritor y maestro Manuel Flores Arguijo, inclaudicable luchador que fue asesinado precisamente orientando a jóvenes en un instituto de educación media de Tegucigalpa. Manuel nunca hipotecó su pluma y allí está su legado de horradez intelectual en los centenares de artículos que escribió.

Claro! en Honduras tenemos la vida vendida obreros, campesinos, trabajadores e intelectuales y no hay nadie,obsolutamente nadie, que pare esta sangría, sangría que más temprano que tarde tocará las puertas de los represores. Nadie por supuesto quiere vendetas y venganzas, pero es necesario que los golpistas reflexionen sobre el enorme daño que le están causando a Honduras, a sus ciudadanos, pues una vez envueltos en una violencia generalizada todos perderemos, que no quepa la menor duda.

Hubo un escritor golpista, cabeza caliente, con ínfulas de guru, recién comenzado el Golpe de Estado, que llamó a las fuerzas represivas para que reprimieran a los intelectuales, escritores y maestros por que eran más peligrosos que Mel, pues aquellos eran "marxistas trasnochados" que atentaban contra la legalidad burguesa. Pues bien, aquí están los resultados de aquellos llamados cazabrujistas, propios de l facismo.

En el caso de Ricardo, como al igual con todos los perseguidos y amenazados, habrá que organizar (debe hacerlo la Resistencia) una forma de protegerlos, pues es injusto perder una vida por que así se le antoja al salvajismo entronizado en el regimen actual.

Deben saber los golpistas que las únicas armas que tienen los escritores son las palabras, las ideas y, por tanto, se exige que ellos, los golpistas, hagan lo mismo,contraponiendo ideas y argumentos y no balas asesinan. (Oscar Amaya Armijo)

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